Todo lo bueno se acaba, y este verano está en las últimas ya. No quiero que se acabe pero puedo decir que fue el mejor verano de mi vida, que no me importaría volver al 21 de junio y que todo empezara otra vez. Aun parece que fue ayer cuando estábamos como locas porque llegara San Juan y ahora eso ya queda lejos.

 

 

 

 

Y lo bien que lo pasamos este dia que eh? Fue un San Juan para recordar, no fuimos al Orzán ni a Bastiagueiro pero fue increíble. Yo quiero que todos los deseos que pedí se me cumplan, y os preguntareis... Que deseos? Pues no os los puedo contar porque si os los cuento no se cumplen.

Aun me acuerdo de la primera verbena de tantas a las que fuimos este verano, aquella noche no puedo decir que fuera la mejor del verano, solo fue la primera y lo dejamos ahi. Fuimos de verbena en verbena como buenas amantes incondicionales de las verbenas que somos.

 

 

 

 

En Santa María el sábado celebré mi cumple y se me escapó alguna lágrima al ver el album que me regalaron las mejores en el que estaba parte de nuestra, por ahora, pequeña historia. Aii lo bien que lo pasamos esos dos días.. Ojalá tuviera una máquina del tiempo para poder volver a vivir todo esto. Sé que por mucho que lo repita estamos en septiembre y junio no va a volver, pero me gusta pensarlo.

 

 

 

Y el día de mi cumple estuvo la gente que yo más quiero, esos que conocen mi peor versión y aun asi siguen ahi, conmigo. Son esos que cuando me ven mal me sacan una sonrisa aunque ellos estén peor que yo, son esos que aunque les de una mala contestación siguen ahi a mi lado, SON LOS MEJORES.

 

 

Y me falta el Socorro, que cada año se supera. Este año fue épico, un graaaan Socorro! Ya es tradición nuestro colacao al llegar a casa y eso queda para toda la vida, todas las veces que vayamos de fiesta al llegar a casa tomamos un colacao.

 

Ah y no puedo olvidarme de esas tardes en la playa de risas con Noe y aguantando sus quejas por las algas.. También se me olvidaban esas tardes en Bribes con los niños, también lo pasamos muy bien allí.

Y después de este verano tan increíble, vuelve el invierno, el frío, vuelve la maldita rutina y empieza otro curso pero este es diferente. Este curso ya no la vamos a tener en los recreos para poner cordura en nuestras locuras, no vamos a poder mirarnos en clase y reirnos sin motivo ninguno, no voy a poder darte un abrazo cuando tenga un mal día, ni salir de un examen decepcionada y escuchar un: "Fijo que apruebas". Ya no voy a bajar más contigo a la cafetería ni comer contigo en el parque, ya no vamos a poder hacer los examenes en grupo en historia... Ya nada va a ser igual en el instituto sin ti. Pero las cosas entre nosotras no van a cambiar, ya te lo prometí y yo siempre cumplo lo que prometo. Solo me queda daros las gracias por hacer de este verano el mejor de mi vida y pensar que ya queda menos para el verano 2014, que estoy segura de que va a ser igual o mejor que este.

 

TANIA.